Las huelgas paralizan Francia. A 50 años del mayo francés, lxs ferroviarios del SNCF, lxs empleadxs de AIR FRANCE, lxs estudiantes universitarios y lxs recolectores de basura se encuentran en lucha como resistencia a medidas de ajuste que quiere aplicar el gobierno de Emmanuel Macrón.
En septiembre del año pasado, a cinco meses de asumir como presidente, Macrón logró hacer pasar una reforma laboral que flexibiliza la contratación y los despidos en el marco de una política liberal, a pesar de la movilización en las calles. Pero la partida no había terminado. El gobierno se lanza ahora a una arriesgada reforma de la SNCF (Sociedad Nacional de Ferrocarriles) por la cual la empresa ferroviaria estatal se transformaría en una sociedad anónima, abriendo a futuro la posibilidad de la privatización.
La línea surge de la Union Europea, que plantea que cada miembro deberá abrir sus servicios ferroviarios a empresas privadas. La excusa de Macrón es la deuda de casi 50.000 millones de euros que amenaza al sistema ferroviario y que terminaría afectando a los nuevos empleados bajo un estatuto diferente y mas precarizado. De esta forma lxs cheminots (como se los llama a los trabajadores del ferrocarril) serian los que terminarían pagando la deuda de la empresa.
La reforma también propone ponerle fin al estatuto especial del que gozan sus trabajadores ferroviarios, que les garantiza un empleo de por vida y la jubilación a los cincuenta años, entre otros derechos, afectando a alrededor de 140.000 ferreviarios.
Los sindicatos ferroviarios están respondiendo con una contundente huelga escalonada que arrancó el 3 de abril y prevé paros de dos días de cada cinco durante dos meses en un sistema de transporte que usan a diario 4,5 millones de personas y afecta el transporte internacional a Reino Unido, España, Italia, Suiza, Bélgica y Holanda.
Unidad de las luchas
A esta huelga ferroviaria se le suma la lucha de lxs trabajadores de AIR FRANCE que han realizado siete jornadas de huelgas provocando la cancelación de cientos de vuelos. El reclamo consiste en un 6% de incremento salarial después de siete años de salarios congelados mientras la empresa propone el 1%. Por otro lado, lxs estudiantes mantienen la toma de más de una docena de universidades desde el 26 de marzo, siendo Tolbiac una de las más combativas, donde se han organizado asambleas unitarias con la participación de obreros ferroviarios en lucha. El ajuste llego a la universidad en forma de filtro llamado la Ley Vidal, que establece criterios de selección para el acceso a la facultad. Una delegación de trabajadores ferroviarios se han acercado en apoyo a los estudiantes después de que un escuadrón de policías antimotines desalojara la universidad de la Sorbona.
Perfume a Mayo Francés
Se cumplen cincuenta años del mayo francés. La represión de universitarios el 3 de mayo de 1968 por una protesta en la Sorbona desembocó en una huelga general de 10 millones de trabajadores que pusieron al capitalismo francés contra las cuerdas durante un mes, bajo consignas como “seamos realistas, pidamos los imposible”. Hoy, ante una nueva avanzada ajustadora del capitalismo, estudiantes y obreros vuelven a luchar y a construir los lazos de unidad que amenazaron con dar vuelta todo hace medio siglo.
Daiana Camera