Yemen, el país más pobre de Medio Oriente, se encuentra ahora en una destructiva guerra imperialista. Lo que está pasando allí ahora es una horrible destrucción. La hambruna, la sequía y las enfermedades epidémicas amenazan a millones de personas bajo el asedio saudí. Mientras tanto, el mundo hace como el avestruz. En los medios de comunicación, la destrucción y los grandes crímenes de lesa humanidad no son visibles.
El pueblo yemení se había rebelado contra la dictadura de 33 años de Ali Abdullah Saleh. Las protestas fueron brutalmente reprimidas, causando más de 800 muertes. A pesar de esto, unos meses después, Saleh tuvo que renunciar a favor de su vicepresidente. Como el pueblo yemení no tenía un programa de organización, Mansur al Hadi, que es un colaborador del imperialismo y tiene fuertes lazos con el reino saudí, tomó el poder. Después, la minoría chiíta Houthi, en la parte norte de Yemen, cercana a Irán, se rebeló contra el gobierno. La oposición armada Houthi amenaza los intereses del imperialismo. A mediados de 2015, una coalición liderada por Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, con la participación de Kuwait, Bahrein, Qatar, Marruecos, Sudán, Jordania y Egipto, y el apoyo de Inglaterra, Estados Unidos y Francia, lanzó la Operación Tormenta Decisiva, un enorme despliegue militar destinado a detener la rebelión Houthi. Además, esas fuerzas imperialistas están brindando apoyo militar a ISIS y Al-Qaeda.
La coalición, que está formada por diez países con el liderazgo de Arabia Saudita, continúa bombardeando este país. Hasta ahora; más de dos mil civiles murieron y decenas de miles resultaron heridos en estos ataques. Cientos de miles de yemeníes se convirtieron en refugiados en su propio país. La infraestructura de los pobres de Yemen está siendo devastada por aviones de combate saudíes; Aeropuertos, puentes, unidades de producción están siendo atacados. El futuro de la gente de Yemen está siendo robado. Sin embargo, la coalición liderada por Arabia Saudita no pudo frenar la resistencia Houthi.
Los revolucionarios debemos estar a favor de la derrota del imperialismo en Yemen.
Una inspiradora y prometedora acción obrera contra esta masacre fue organizada por los trabajadores portuarios italianos días atrás. Se negaron a instalar las armas de una nave saudí y protestaron contra la brutalidad imperialista. Revelaron los crímenes imperialistas mientras todos guardan silencio en Occidente. Saludamos su acción. Necesitamos más de estas luchas.
Además, nosotros, como nueva organización internacional, debemos levantar la voz contra esta guerra.
Resoluciones:
- Realizar una campaña contra los crímenes de guerra de Arabia Saudita. Denunciar a Estados Unidos e Israel.
- Propuesta de consigna de la campaña contra la guerra de Yemen: “¡No toquen Yemen!”
- Formar un frente de campaña contra la agresión imperialista en Yemen con fuerzas antiguerra.
- Conjuntamente desplegar una campaña contra las amenazas de guerra del imperialismo estadounidense sobre Irán sin brindar ningún apoyo al régimen y una solidaridad activa con el movimiento de la clase obrera en Irán.