Por Alberto Giovanelli
Las múltiples acciones de lucha que desde hace más de dos meses recorren nuestro país, pueden tomar el próximo 9 de febrero un nuevo impulso por el llamado a Paro General que, convocado desde la CGTP, agrupa a las decenas de organizaciones sociales que impulsan la pelea contra Boluarte y el régimen del 93. La movilización que, como relatamos en artículos anteriores, se inició en el sur del país, se ha ido extendiendo a todas las regiones y en los últimos días se ha trasladado a Lima como el epicentro de los reclamos.
Numerosas delegaciones del interior del país, los jóvenes, los campesinos, los pueblos indígenas, los trabajadores del arte y ahora los sindicatos a través de la CGTP, están jaqueando al gobierno y superando la dispersión a pesar de expresar aún muchas debilidades. La continuidad, que se ha dado en casi 60 días de lucha, no se ha podido detener a pesar de los 65 muertos y la represión indiscriminada que ha sido la única política implementada desde la dictadura cívico y militar.
El llamado que por fin se anima a hacer la CGTP abandonando, producto de la presión de las bases, la política desmovilizadora del «acuerdo nacional», es un dato de trascendencia porque puede significar la entrada en escena del movimiento obrero en su conjunto, ya que hasta el momento, sectores aislados sobre todo los de la minería, la docencia y la pesca, han participado activamente de la exigencia de renuncia de Boluarte y el cierre del congreso. Pero una vez más, queremos destacar, que lo que se cuestiona es la totalidad del régimen impuesto por el fujimorismo en el 93.
No hay salida posible si no se derrota a la totalidad de las instituciones que el pueblo repudia. Esta afirmación y definición es de una importancia trascendente, porque el hipotético llamado a adelanto de elecciones, lo entendemos claramente como una trampa que busca detener la movilización y defender la institucionalidad burguesa.
Lamentablemente, la centroizquierda y la propia CGTP, son parte de la trampa al proponer el adelanto de elecciones; solo a modo de ejemplo, son tristemente destacables las declaraciones públicas de Verónica Mendoza, convocando «al diálogo nacional para debatir la posibilidad de una reforma constitucional». Queremos ser contundentes y ser claros en el debate con los miles y miles de luchadores que se movilizan: nuevas elecciones sin derrotar el régimen del 93 solo nos llevaran a nuevas frustraciones porque deberemos elegir entre los mismos que hoy repudiamos todos los días en las calles del país.
A partir de la huelga del próximo jueves, deberemos darle continuidad y mantener la ofensiva para lograr la caída del gobierno, el cierre del congreso, la asunción de un gobierno de las organizaciones en lucha y el llamado a la Asamblea Constituyente verdaderamente Libre y Soberana. Esta Asamblea Constituyente deberá debatir la salida a la miseria creciente, la ruptura con el FMI, la defensa de nuestra tierra y el manejo independiente de nuestros recursos naturales al servicio de las grandes mayorías populares.
Entendemos también, que para llevar adelante estas tareas, es indispensable la organización de la vanguardia detrás de un programa realmente de cambio que no puede ser otro que un programa socialista y revolucionario, para dar vuelta todo y que gobiernen los que nunca gobernaron, los trabajadores y el pueblo pobre.
La LIS: internacionalismo consecuente
Así como los compañeros peruanos de la LIS estámos al frente de la pelea acompañando a nuestro pueblo, también las organizaciones simpatizantes de nuestra internacional en todo el mundo han expresado su solidaridad con nuestra lucha.
Es por eso que se han impulsado numerosas acciones tanto en embajadas, consulados y organismos internacionales. En los próximos días se redoblaran los esfuerzos en los 5 continentes y hacemos un llamado a lograr la más amplia unidad de acción detrás del repudio a Boluarte, la dictadura cívico / militar, el Congreso y los defensores del régimen del 93.
Así como en Buenos Aires los militantes de la LIS nos movilizamos a las puertas de la reunión de la CELAC, denunciando la inacción de ese organismo frente a la dictadura, también nos movilizamos en distintas ciudades de Argentina, en Colombia, Costa Rica, Paraguay, España e inumerable cantidad de paises. Queremos destacar especialmente como ejemplo de solidaridad de clase e internacionalismos, a nuestra organización hermana de Ucrania, que en medio de la guerra y enfrentando situaciones extremas en la pelea contra el imperialismo de Puttin, ratificó su apoyo y solidaridad con el pueblo peruano.
Por estas horas tambien la compañera Celeste Fierro estará viajando a Lima, como hace unos dias lo hizo Nadia Burgos, en esta oportunidad para estar presente durante la huelga general de este 9 de febrero y luego recorrer distintas regiones y participar de reuniones con organismos en lucha para fortalecer cada uno de los objetivos que nos proponemos en esta revolución en marcha.