A 5 años de la rebelión social en Nicaragua, que puso contra las cuerdas al gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo, la LIS junto a su sección nicaragüense Alternativa Anticapitalista, convocó un Foro realizado este 22 de abril. La actividad hace parte de las resoluciones votadas en el reciente II Congreso Mundial de la Liga Internacional Socialista.
El evento contó con un panel muy representativo:
*Yader Parajón, joven activista recientemente ex carcelado por la dictadura y exiliado en EEUU.
*Lludely Aburto, ex militante del FSLN y líder estudiantil durante la revolución de 1979 y ahora exiliada en Costa Rica e integrante de la Articulación de Movimientos Sociales.
*María José Lechado, migrante nica en Costa Rica e integrante del PRT de ese país.
*Mohamet Pacheco, estudiante nicaragüense exiliado y militante de Alternativa Anticapitalista, LIS-Nicaragua.
A través de una primera ronda de exposiciones, los ponentes fueran presentando distintas aristas de debates muy presentes en la vanguardia luchadora nicaragüense y centroamericana. ¿Qué pasó que Nicaragua y Centroamérica fueron epicentros de revoluciones en la década de 1980 y hoy tiene a regímenes como el de Nicaragua o Bukele en El Salvador? ¿Por qué no avanzó el proceso en aquél período? ¿Cuáles fueron las principales conclusiones de la rebelión de abril de 2018? ¿Por qué la brutal represión posterior y consolidación de un régimen de dictadura capitalista con métodos estalinistas en Nicaragua? ¿Qué tareas tiene planteada la izquierda internacionalista y crítica frente a ese panorama?
Desde el testimonio de Yader y la cárcel sufrida durante más un año en su último encierro (fue tres veces preso), pasando por la decepción con el proyecto del sandinismo que narró Lludely, y por la crítica histórica a las limitaciones del FSLN que planteó María José el encuentro tuvo momento de alta emotividad y profundas reflexiones políticas. En todas las intervenciones se reconoció el rol potente de la Liga Internacional Socialista desde el primer minuto de la rebelión, como en todo el proceso posterior, insistiendo en la necesidad de ratificar ese rumbo. El cierre a cargo de Mohamet, colocando en debate las tareas de solidaridad internacional a partir del balance de la Comisión Internacional que encabezó la LIS y que jugó un papel de gran impacto regional hace apenas unos meses, y que contribuyó a la liberación de los más de 200 presos y presas políticos entre los cuales se contó Yader. Y a la vez, fundamentalmente, remarcó la necesidad de construir herramienta política en Nicaragua y Centroamérica con perspectiva socialista revolucionaria e internacionalista, redondeó una actividad seguida con mucha avidez por militantes, simpatizantes y actividades de distintos países. Hubo saludos de Costa Rica, de Brasil, de distintas regiones de Argentina, de República Dominicana, de Paraguay, El Salvador, de Brasil, del Estado Español, entre otros.
La ronda final dejó planteado el desafío de retomar nuevas iniciativas de solidaridad internacional por la libertad de los presos políticos que aún mantiene el régimen de Ortega-Murillo y por la caída definitiva de esa dictadura.
En definitiva, una iniciativa positiva, seguida por centenares de participantes entre la modalidad virtual y bimodal con reuniones presenciales que en distintos lugares se autoconvocaron para asistir al evento.