El gobierno del AKP recibió un duro golpe en las elecciones del 31 de marzo. Aunque Erdogan dice que “somos por lejos el primer partido”, la derrota del AKP en las tres ciudades metropolitanas y los centros que concentran la industria, el turismo, los sectores de servicios y las universidades, demuestra que el AKP es el perdedor de esta elección. Los trabajadores y la juventud le han propinado una bofetada a la dictadura unipersonal. Las políticas polarizadoras salvaron al AKP de un desplome total, ya que conserva popularidad entre los trabajadores no organizados y las zonas rurales. De todas maneras, el resultado es un fiasco para el partido de gobierno, porque tenía la ventaja del uso ilegítimo de los recursos estatales, ejerció una enorme presión sobre la oposición con el poder de los medios que controla. A pesar de todo, el AKP fracasó. Los resultados de esta elección son muy importantes.
Resumimos las principales conclusiones:
- El resultado de la elección demuestra que es completamente equivocada la idea de que la gente es dócilmente leal al AKP. La arrogancia y la legitimidad de la dictadura recibieron un golpe importante. Esto es muy importante para los revolucionarios, ya que la desilusión crónica en la oposición había paralizado la respuesta popular y dificultado la lucha revolucionaria.
A pesar de la debilidad de su contenido político, el optimismo que trae el retroceso del AKP creará un ambiente positivo para nosotros. Hay importantes oportunidades para aumentar el peso de los socialistas en la sociedad. Aunque, más allá del éxito de algunas figuras en partícular, sólo la dirección de una organización militante con un programa fuerte y un frente único de la izquierda revolucionaria, puede hacer la diferencia.
- El MHP se fortaleció en relación al AKP, aunque hicieron campaña juntos (Alianza Nacional), lo que va a desestabilizar su bloque. Nuevas alianzas, nuevas necesidades y nuevas posibilidades van a surgir en el ámbito político burgués. En la medida que se intensifique la crisis económica, las contradicciones en las clases dominantes serán más visibles, lo cual generará oportunidades para la lucha de clases. La crisis económica y las movilizaciones obreras hacen que la dictadura AKP-MHP no pueda ser tan agresiva contra los trabajadores, por las posibilidades delas acciones obreras contra la crisis.
- Aunque el CHP logró un éxito importante en los resultados, esto se debe más a la falta de otra alternativa que al éxito de la gestión del CHP. De hecho, un análisis más cercano de los resultados, cuentan otra historia. Las políticas neo-liberales y malas gestiones de gobierno, llevaron a muy malos resultados en municipalidades donde el CHP ya gobernaba. A pesar de la crisis económica y el retroceso general del AKP, el CHP retrocedió en provincias como Thrace, Mugla, Zonguldak, Giresun, etc. Esta claro que, si no fuera por la profundización de la crisis económica y el giro de la opinión pública contra la dictadura del AKP, estos resultados no se darían.
- El CHP mantiene su compromiso son el neo-liberalismo, la UE, el gran capital y los Estados Unidos, por lo cual el CHP no puede ser nunca una alternativa para los trabajadores. Por ejemplo, ante la intensificación de la crisis económica, el CHP, ¿dará una pelea contra el FMI y las políticas que implementará según el acuerdo que firmó con el AKP, o defenderá la armonía con el capital internacional y los interesas patronales? Las posiciones claves en la CHP están en manos de empresarios y políticos de derecha, y su programa es capitalista.
- El apoyo al CHP de los votantes del HDP jugó un papel evidente en el éxito del CHP en casi todas las regiones. Por otro lado, el HDP, que de esta forma determinó los resultados en el oeste, aparentemente fracasó en las provincias kurdas. Esto se debe al pobre balance del HDP en las municipalidades que gestiona, el efecto de la propaganda del AKP y la respuesta a las recientes guerras de autonomía, que han marcado todo el proceso.
- El triunfo del “alcalde comunista” Macoglu en Dersim es una importante oportunidad para que las políticas socialistas alcancen a los trabajadores de toda Turquía. Esperamos que esta oportunidad se aproveche. Es una gran incógnita que gran parte de la izquierda socialista de Turquía haya sido sectaria y vacilado en apoyar a Macoglu, que brinda un gran prestigio a las políticas socialista y crea oportunidades. Estos sectores han demostrado que no son capaces de hacer avanzar la lucha de clases. Es evidente que la actitud hostil del HDP y las organizaciones que la integran contra Macoglu va a dejar profundas marcas en la política de la izquierda.
- En el período que viene, en el que la crisis económica se profundizará aún más, la lucha por que los costos de la crisis la paguen los capitalistas va a cobrar peso. Esta pelea sólo se puede llevar adelante con las herramientas de la lucha de clases. No hay urnas en esta lucha. Sobre el bolsillo de los trabajadores, las necesidades de sus hijos, sus alquileres, ropa, etc., los trabajadores sólo pueden contar con ellos mismos y con los socialistas. Por eso, la izquierda socialista tiene que postularse como aternativa. Sin duda es importante que la dictadura del AKP ha retrocedido, pero nuestro futuro depende de que avance la lucha por el socialismo. De otra forma, la opresión vuelve y la explotación se agrava más y más. Si no estamos organizados y empoderados, quedamos vulnerables a cualquier oscuro escenario que la historia nos traiga.