El miércoles 8, en la Plaza Santo apóstol de Roma, se realizó un acto de inmigrantes contra la discriminación racial.
Asistieron distintos sectores de inmigrantes, partidos de izquierda y colectivos feministas. En simultaneo se realizaron actos en Florencia, Livorno, Ancona, Chieti, y el 23 en Torino y se programarán en otras regiones.
La convocatoria resaltó que prima desde el gobierno el racismo y la discriminación. En el marco de una crisis económica no superada que afecta a la sociedad, algunos prófugos son usados como chivo expiatorio para fomentar una guerra de pobres contra pobres. La casta política está empeñada en criminalizar en vez de ser solidaria.
En diciembre del año pasado se realizó una manifestación masiva. Hoy se ven en la necesidad de volver a convocar por los derechos que pretenden recortar: por la regularización de migrantes y refugiados, por el derecho a la vivienda / recepción (italianos, migrantes y refugiados), contra los acuerdos bilaterales sobre deportación de personas, reconocimiento del domicilio de facto para la renovación del permiso de residencia – Derecho de residencia y derogación del artículo 5 del plan hogareño Renzi-Lupi, ruptura del vínculo que subordina el permiso de residencia al contrato de trabajo / número de IVA.
En la manifestación se expresó el rechazo a la violencia ejercida sobre quienes no responden con más violencia y se planteó la necesidad de estar siempre unidos porque “el problema de África no se llama África, se llama Europa.”
Como allí se dijo: “oponemos al pesimismo de la región el optimismo de la voluntad”, “el futuro está aquí adentro, en la Plaza, depende de nosotros que se haga masivo”, “la marcha es decidida por todos no por los patrones, y la haremos juntos.”
Esto se da en el marco de un grave ataque a los inmigrantes en su mayoría provenientes de África. El gobierno italiano dejó abandonadas a 629 personas rescatadas del mar por el Aquarius (entre ellas había mujeres embarazadas y niños sin acompañante), que ya se encuentran en Valencia, España. Al momento de escribir esta nota, se repiten trabas a una acogida, en este caso al barco de la ONG alemana Lifeline, que tiene abordo 224 personas rescatadas.
La bestia que lleva adelante este ataque antihumano es el Ministro de Interior Mateo Salvini, quien se refirió a las personas del Lifeline como “…carne humana” apoyado por el Movimiento 5 Estrellas (M5E) y la ultraderechista Liga, el primer ministro es Giuseppe Conte.
La situación de inmigrantes y refugiados ante la insensibilidad de la UE motivó una seria crisis que será abordada en una comisión mini cumbre de emergencia que se realizará el próximo domingo y será tema de debate en la cumbre del bloque del 28 y 29 en Bruselas.
Mónica Sulle