La militarización del Wallmapu, por el Estado Chileno, desplegados al sur de Chile en las regiones del Bío Bío, Araucanía y Los Ríos, no es algo reciente, el conflicto, la criminalización y persecución es algo histórico, destinando con ello esfuerzos, recursos humanos y financieros para reprimir, vigilar, allanar y castigar a las comunidades mapuches que mantienen una lucha ancestral por la recuperación de sus tierras, teniendo como resultado la violencia policial desmedida, apremios ilegítimos, montajes judiciales, encarcelamientos y como lo vimos este miércoles 15 de noviembre una nueva muerte, la del joven comunero Camilo Catrillanca en manos del Comando Jungla creado por el Gobierno empresarial de Sebastián Piñera.
El terrorismo del Comando Jungla.
El Comando Jungla es la fuerza policial destinada para luchar contra la Comunidad Mapuche catalogada como terroristas pero que en fondo lo que busca es defender y proteger los intereses de los empresarios forestales y de la industria extractivista. Este comando está conformado por 80 funcionarios de Carabineros que se prepararon en Colombia y Estados Unidos para “combatir la violencia rural en la zona”. Entre el equipamiento que manejan encontramos camionetas blindadas, tanques, sistemas aéreos, binoculares, cámaras HD y uniformes especiales, con todo esto buscan reprimir a quienes sólo luchan por la justa reivindicación de sus tierras que les han sido robadas por el estado de Chile y los grandes Capitales.
Por años se ha buscado criminalizar a la Comunidad Mapuche, justificándolos con hechos como el que ya hemos visto en el caso Luchsinger Mackay lleno de vacíos legales y montajes, o como cada asesinato a comuneros mapuches que terminan en un entramado que incluso son imposible de llevar por las propias instituciones represivas.
Lo que el Estado chileno busca es proteger el negocio de la depredación forestal que hacen las empresas de Matte y Angelini, grupos económicos que son reconocidos financistas de campañas políticas, quienes acumulan en despojo del territorio mapuche y de la depredación de la tierra.
La hoja de ruta de Piñera: Sistematizar la represión.
Dicha lógica es la que continuamos viendo con los argumentos entregados por el Gobierno frente a la muerte de Camilo Catrillanca, como lo expresa Andrés Chadwik que desde su posición de Ministro del Interior y de Vicepresidente indica que el comunero Mapuche fue asesinado dentro de un operativo realizado por a carabineros hacía “delincuentes comunes”, es ahí cuando surgen las interrogantes de ¿Porque si fue un robo común tuvo tal impacto policial, con armas de guerra y termina con la muerte del nieto de un lonco reconocido de la Comunidad?
Por otro lado, Sebastián Piñera a través de Twitter manifestó que lamentaba la muerte del comunero, que se investigará, pero a su vez apoya el actuar de Carabineros al “defenderse cuando son atacados”, sin embargo, los hechos señalarían que el ataque fue realizado en contra del comunero quien circulaba en un tractor, sin armas, acompañado de un menor de edad y sin ninguna provocación, recibiendo dos disparos en su cabeza.
Ninguno de los hechos señalados por el Gobierno justifica el actuar de la fuerza policial, matar a sangre fría al joven comunero.
Como hemos visto en este y otros casos el Estado mantiene su postura de defensa a la fuerza policial, sin embargo jamás se le ha visto en defensa del pueblo Mapuche, por el contraría condenan, criminalizan y responsabilizan a la comunidad de una guerra inexistente provocada por la militarización desplegada en la zona.
No debemos dejar de lado la información que nos entregan los medios de comunicación una vez más coludidos con el gran capital, entregando información poco clara o de lleno, sin informar sobre la realidad que se vive en el sur de nuestro territorio con el pueblo Mapuche.
Mataron a Camilo Catrillanca.
A Camilo lo mataron a los 24 años, dejando a su hijo, a su esposa quien se encuentra embaraza. Catrillanca fue vocero importante de la comunidad desde los 15 años, principalmente destacando en la toma del 2011 de la Municipalidad Ercilla, acompañando al movimiento estudiantil, apoyando de esa forma la educación gratuita y de calidad, educación intercultural y al fin da la violencia policial en la zona.
La represión además se deja ver en manifestaciones en repudio del asesinato de Catrillanca, hoy 15 de noviembre se realizaron convocatorias en diferentes puntos del país e incluso Argentina. Una de estas convocatorias fue en el centro de Santiago donde la represión desmedida de los aparatos del Estado, queriendo desde Carabineros y el gobierno demostrar con prepotencia sus fuerzas y sus políticas antidemocráticas, lanzando gases directamente a los manifestantes que ni siquiera habían puesto un pie en las calles, intentando acallar con la violencia que les hemos visto desatar en el último tiempo en las comunidades mapuches y en los colegios: una represión totalmente irracional y desmedida. Aún así fuimos miles en las calles por la memoria de Camilo y por tod-s los luchadores asesinados.
Movilización permanente por el fin de la militarización en el WallMapu
Desde Juntas y a la Izquierda y el Movimiento Anticapitalista condenamos el asedio constante de los aparatos represivos y del Estado chileno a la Comunidad Mapuche y la indiferencia de las autoridades políticas. Rechazamos la militarización del Wallmapu y exigimos la desarticulación inmediata del Comando Jungla; verdad, juicio y castigo a los responsable directos e indirectos del asesinato de Camilo Catrillanca. En ese sentido es imperioso que las organizaciones sociales y políticas junto al pueblo Mapuche nos movilicemos permanentemente y nos parecería positivo que el Frente Amplio por la tribuna que ocupa con 20 diputados se ponga a disposición de revertir las lógicas represivas y que junto a la movilización podamos articular un gran movimiento que ponga termino al terrorismo de Estado.
Javiera Vargas y Mercedes Varas.Militantes de Juntas y a La Izquierda y del Movimiento Anticapitalista