Informaciones de prensa no desmentidas oficialmente por el presidente Nicolás Maduro ni por los Ministros de Defensa o de Relaciones Exteriores manejan la existencia de conversaciones o de un posible acuerdo de los gobiernos de Rusia y Venezuela, para la instalación de una base militar rusa en la isla venezolana de La Orchila, e incluso, las agencias noticiosas han hablado de posible acondicionamiento y uso de instalaciones para fines navales militares en la península de Paria, en las cercanías del Delta del Orinoco.
Marea Socialista rechaza rotundamente tal posibilidad y cree necesario que el pueblo y la sociedad venezolana entera se movilicen para impedir esos presuntos proyectos que además de ir contra la soberanía de la nación nos colocarían en el fuego cruzado de los conflictos entre las potencias, entre el imperialismo norteamericano y los imperialismos emergentes (Rusia y China) que codician nuestros recursos en lo que Estados Unidos considera como su «patio trasero». Además, tal base militar, en ningún caso sería para defender al pueblo venezolano de otras amenazas sino para defender a un gobierno depredador y opresor de su pueblo, que traicionó los ideales de la revolución bolivariana, y que lo hace igualmente con los principios establecidos por Bolívar con la gesta de la independencia.
Hasta el momento de iniciar la redacción de esta declaración de prensa, no se sabía de ningún desmentido ni de ninguna información o explicación de carácter oficial, por parte del gobierno venezolano, ya que las noticias provienen sólo de agencias rusas. Las informaciones sobre los supuestos planes de establecer una presencia militar rusa viene circulando por lo menos desde el mes de septiembre, pero las agencias de noticias de este país lo dieron está vez como una decisión tomada, y además esta información fue antecedida por el reciente viaje de Maduro a Rusia y la visita de bombarderos rusos a nuestro país, lo que volvió a disparar las alarmas.
Sin embargo, el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente del PSUV y del gobierno, Diosdado Cabello, emitió unas muy desafortunadas e insensatas opiniones, según las cuales la autoridad del máximo organismo nacional de facto, estaría dispuesta a violar el Art. 13 de la Constitución vigente, no una sino hasta diez veces, al decir: «Por allí salió una noticia de que Rusia prepara la instalación de una base militar en La Orchila, ojalá fuera verdad y no una, sino dos, tres, cuatro o diez. ¿Pero con qué razón dicen eso? Ahora si es una amenaza Venezuela».
Ignora o no se percató, ¡nada más y nada menos que el presidente de la ANC!, o lo que es peor, le tendría sin cuidado, que eso vaya en contra de lo dispuesto de manera muy clara por el Artículo 13 Constitucional, según el cual: «El territorio nacional no podrá ser jamás cedido, traspasado, arrendado, ni en forma alguna enajenado, ni aun temporal o parcialmente, a Estados extranjeros u otros sujetos de derecho internacional. El espacio geográfico venezolano es una zona de paz. No se podrán establecer en él bases militares extranjeras o instalaciones que tengan de alguna manera propósitos militares, por parte de ninguna potencia o coalición de potencias.
Los Estados extranjeros u otros sujetos de derecho internacional sólo podrán adquirir inmuebles para sedes de sus representaciones diplomáticas o consulares dentro del área que se determine y mediante garantías de reciprocidad, con las limitaciones que establezca la ley. En dicho caso quedará siempre a salvo la soberanía nacional. Las tierras baldías existentes en las dependencias federales y en las islas fluviales o lacustres no podrán enajenarse, y su aprovechamiento sólo podrá concederse en forma que no implique, directa ni indirectamente, la transferencia de la propiedad de la tierra». (Resaltado nuestro)
Entendemos que es una de las razones que tienen Diosdado, el gobierno de Maduro y la Constituyente de la burocracia para querer cambiar de manera regresiva la Constitución que ahora tanto les molesta, con la finalidad de meter en Venezuela a fuerzas militares de los inversores imperialistas que vienen tomando posesión del Arco Minero del Orinoco, de la Plataforma Deltana, de las Zonas Económicas Especiales y adquiriendo cada vez más participación en el manejo de activos y recursos venezolanos, mientras el Desfalco de la Nación continúa y el pueblo trabajadores se sigue empobreciendo y perdiendo sus derechos.
Con la misma fuerza que condenamos cualquier pretensión de establecer bases militares extranjeras en el suelo patrio, rechazamos contundentemente las operaciones de los Estados Unidos para cercar y asediar a Venezuela con bases militares en Colombia o en las islas de Curazao y Aruba, o en cualquier otro país latinoamericano, en contra la soberanía de los pueblos o en preparación de planes intervencionistas contra nuestra nación. Denunciamos el papel que juegan sectores dirigentes de la derecha opositora tradicional venezolana, que le sirve de instrumento político para sus maniobras y que busca la salida del gobierno de Maduro mediante la intromisión imperialista estadounidense.
Exigimos al gobierno que informe respecto a los presuntos acuerdos con Rusia, que respete el Art 13 de nuestra Constitución y que renuncie a cualquier plan de instalación de bases militares extranjeras en nuestro país, por cuanto sólo podemos contar con el propio pueblo venezolano en ejercicio de su soberanía y con la solidaridad de los pueblos de América Latina y del mundo. Hagamos todo cuanto sea posible para garantizar que el espacio geográfico venezolano sea una zona de paz, como dice la CRBV.
- No bases militares extranjeras en Venezuela
- Ni gringos, ni rusos, ni chinos.
- Respeto a la soberanía de la nación venezolana.
- Respeto al Art 13 de la Constitución
- Solidaridad de los pueblos Latinoamericanos y del mundo sí; intervencionismo no