La Liga Internacional Socialista (LIS) repudia y llama a los trabajadores y pueblos democráticos del mundo a rechazar con contundencia el despliegue militar del Comando Sur de EE.UU en el Caribe ordenado por Donald Trump el 1 de abril, con la excusa hipócrita de controlar el flujo de narcotráfico.
Esta acción constituye una nueva escalada en la agresión imperialista contra la soberanía y la salud del pueblo venezolano. Hace un año que el imperialismo cerca Venezuela con un bloqueo económico que ahonda los problemas existentes y limita aún más el suministro de alimentos, medicamentos y otras necesidades básicas, hambreando y castigando al pueblo pobre en su afán por derrocar a Maduro e imponer al auto-proclamado presidente Guaidó u otro títere a sus órdenes. Las consecuencias del bloqueo se han agravado desde la propagación de la pandemia de coronavirus lo que afecta en particular a los requerimientos del sistema de salud para atender a la población.
Lejos de responder a los pedidos internacionales, incluso de la ONU, de suspender el bloqueo por la pandemia, el 31 de marzo, el Departamento de Estado hizo público su “nuevo plan” para Venezuela, ofreciendo levantar el bloqueo a cambio de que Maduro entregue el poder a una coalición conjunta con la oposición pro-yanqui. Y amenaza con una acción militar si no se accede a sus propuestas. Desde la LIS, repudiamos y enfrentamos toda intromisión imperialista en la soberanía del pueblo venezolano, el único que tiene derecho a decidir quién gobierna su país.
El despliegue militar del Comando Sur, en respuesta a la negativa del gobierno venezolano a la “propuesta” del Departamento de Estado, es particularmente vil y cruel, al buscar aprovecharse de la situación generada por la pandemia de coronavirus. Adquiere visos verdaderamente criminales y genocidas, pretendiendo extorsionar al pueblo venezolano cuando necesita más que nunca traer equipamiento médico, medicinas y alimentos para enfrentar la pandemia.
La agresión militar es también un ataque al pueblo trabajador de Estados Unidos, uno de los más afectados por la pandemia. Constituye la mayor operación militar estadounidense en la región desde la invasión yanqui de Panamá en 1989. Millones de dólares se destinarán a esta agresión militar, que deberían emplearse en combatir el coronavirus y asistir a los millones de trabajadores que están perdiendo sus empleos.
Con esta escalada del bloqueo e intervencionismo contra Venezuela, el régimen de Trump busca imponer por la fuerza su propia fórmula de gobierno dentro de otro país, violando una vez más todos los principios de soberanía y autodeterminación. Nosotros somos críticos del gobierno de Maduro y la burocracia que se ha enquistado en el Estado. Pero solo reconocemos la potestad de los trabajadores y el pueblo venezolano para determinar sus formas de gobierno y es únicamente su lucha, organización y voluntad democrática la que debe decidir el futuro del país.
Nos solidarizamos con la clase trabajadora y el pueblo venezolano, así como con la militancia venezolana que hace parte de la LIS, en la lucha común contra la pandemia del Covid-19, el intervencionismo imperialista y la explotación, la miseria y el autoritarismo del gobierno.
¡Fuera el Comando Sur de las costas venezolanas!
¡Abajo el bloqueo imperialista!
¡Solidaridad con los trabajadores y el pueblo de Venezuela en su lucha contra la pandemia!
¡Cese inmediato de todo tipo de intervencionismo norteamericano contra Venezuela!