La reunión de la Ejecutiva Nacional del PSOL celebrada el pasado viernes (11/02) acaba de aprobar una resolución que orienta «el proceso de negociación con la precandidatura del ex presidente Lula».
Pero esta resolución es contraria a lo aprobado en el 7º Congreso Nacional del PSOL. El Congreso aprobó que para derrotar a Bolsonaro en el proceso electoral es necesario: a)Autorizar a la Ejecutiva Nacional del PSOL a iniciar diálogos formales para la construcción de un frente electoral de izquierda con miras a la unidad a nivel nacional, así como autorizar a las Ejecutivas Estaduales a hacer lo mismo a nivel local cuando sea posible, teniendo en cuenta la necesidad de derrotar a la extrema derecha y a los gobiernos reaccionarios que tienen una agenda alineada al gobierno de Bolsonaro». Así como, para la definición de nuestra táctica para convocar una Conferencia Electoral.
La mayoría de la dirección nacional del PSOL, en la práctica, cambia la resolución que ella misma aprobó y que abandona al partido a la irrelevancia política en la coyuntura nacional. Las declaraciones públicas de los compañeros de la mayoría han ido en dirección contraria a las resoluciones. Sin embargo, el hecho es que existe un bloque opositor de izquierda en el partido que considera que el apoyo a la candidatura de Lula/Alckmin, de conciliación nacional, no sólo es antagónico a la propuesta del Congreso de construir un frente de izquierda, porque las articulaciones de Lula son con los sectores que promovieron el impeachment que derrocó a Dilma y que generó el gobierno ilegítimo de Temer, así como la aprobación del conjunto de contrarreformas aprobadas en el Congreso.
Por lo tanto, al final, la posición de Lula no ayuda a derrotar al bolsonarismo en las elecciones.
Con la fórmula Lula/Alckmin, no habrá revocación de las contrarreformas neoliberales aplicadas en los últimos años, que tanto penalizan a la clase trabajadora, no habrá impuestos a las grandes fortunas, ni el no pago de la infame deuda pública, que subordina a nuestro país al capital financiero. Con la fórmula Lula/Alckmin no habrá Frente de Izquierda, porque toda la política de Lula y de quienes apoyan esta fórmula es construir el Frente Amplio con los viejos políticos corruptos y burgueses, como su vicepresidente Geraldo Alckmin, Renan Calheiros, Eunice Oliveira y Kassab, del PSD (partido que tiene un Ministerio en el Gobierno de Bolsonaro) y grandes empresarios, como Luiza Trajano. Una reedición agravada de la política de conciliación de clases de los gobiernos petistas de Lula y Dilma.
La situación actual del PSOL nos obliga a mantener el necesario debate político, con todas nuestras energías para ser coherentes con nuestro programa fundacional y evitar la capitulación del partido a la política de conciliación de clases. No aceptamos la propuesta de la mayoría de la dirección nacional y defendemos
Que la Dirección del PSOL cumpla con la resolución del Congreso que convoca la Conferencia Electoral. Precedido por reuniones plenarias de base en los estados, con espacio para todos los cargos, como el de la precandidatura a la presidencia del compañero Glauber Braga, con la elección de delegados de base;
Que la Conferencia ratifique la orientación aprobada en el Congreso de buscar la construcción de un Frente de Izquierda.
Que se garantice un espacio democrático en los plenos de los programas para todas las posiciones expresadas en el partido.
Por ello, convocamos a la militancia a un plenario nacional el miércoles 16 de febrero a las 19 horas. Y el 18/02 para el lanzamiento del Programa de Precandidatura Glauber Braga
Firman:
Glauber Braga – pré candidato a Presidente da República
MES
Fortalecer o PSOL
APS
Comuna
Luta Socialista
CST
Alicerce
Alternativa Socialista
Anticapitalistas
Avança PSOL
Centralidade do Trabalho
LRP
Nova Práxis
PSOL pela Base
Socialismo ou Barbárie
Vamos à Luta – SC
