En las crónicas: “Rumbo a Gaza II y III“ contamos las vicisitudes de la Global Sumud Flotilla desde la salida inicial de Barcelona, el 31 de agosto, hasta las Islas Baleares y la llegada a Túnez respectivamente. En esta ocasión haremos lo propio con referencia a la nueva partida de Túnez al encuentro con otros barcos en alta mar. La misión se da en el marco de la intensificación de la ofensiva de Israel, incluso por tierra, el avance de la ocupación y el agravamiento de la situación humanitaria del pueblo palestino. La Liga Internacional Socialista (LIS) hace un llamado urgente a multiplicar y masificar las acciones solidarias.
Por Rubén Tzanoff
Unidos y alzando la voz por Gaza
Las primeras naves anclaron en Tunis, capital de Túnez, el 7 de septiembre. En los días posteriores llegaron las rezagadas, que anclaron en el mismo puerto o en el de Bizerte, en el cual finalmente se reagruparon. Y el 14 de septiembre partieron hacia la cita en aguas internacionales con otros barcos provenientes de Catania, (Italia) y Grecia.
Dificultades y puesta a punto
En Túnez se hizo más evidente que las cuestiones climáticas, las incidencias con los barcos y la realidad política seguirán condicionando cada milla náutica del trayecto.
Durante la larga estadía en África del Norte, las embarcaciones atracadas sufrieron ataques con drones y las amenazas a los pasajeros de la GSG de ser tratados como “terroristas” propaladas por el ministro israelí Ben-Gvir. Hubo obstáculos logísticos y escasez de combustible.
Esto retrasó la partida hacia el tramo final, inicialmente proyectada para el 4 de septiembre, pero no alteró la tenacidad de la misión, sino que la hizo tomar nuevas medidas: reubicación de barcos en distintos puertos, pruebas en el mar y adopción de más protocolos de seguridad.
En este marco, la coordinación de la GSF decidió reducir la cantidad de participantes en varias embarcaciones.


Nota de prensa.
Comprometido apoyo y cálida despedida
Durante la estadía en Túnez la Guardia Nacional y el Ministerio del Interior rechazaron que el incendio en el “Family” fuera causado por el ataque de un dron, pero calificaron la segunda agresión, en este caso al “Alma”, como un “ataque premeditado” y anunciaron “investigaciones en curso” en lo que configuraría un atentado a la soberanía tunecina.
Mucho más clara y decidida fue la acogida popular. Los voluntarios dieron apoyo logístico y participaron en concentraciones con banderas palestinas y luciendo kufiyas. También estuvo en la ciudad Francesca Albanese, relatora especial de la ONU. Y miles de personas despidieron a la Flotilla mientras zarpaba de Bizerte.
Ya está en curso completar la Flotilla en alta mar para navegar todos juntos hacia el destino final en Gaza, a donde llegarían estimativamente en nueve días. El mensaje que se emite desde el Mediterráneo al mundo es claro: “El bloqueo y el genocidio en Gaza deben terminar”.


Muestra de apoyo popular.
Activismo valiente y solidario
Los activistas -provenientes de distintas latitudes, fuerzas políticas y sociales e independientes – soportan muchos desafíos, obstáculos e incertidumbres, tanto por factores externos como por errores de cálculo ante la enorme tarea construida desde abajo. Estos hechos hacen importante reflejar las vivencias en la Flotilla.
Sin embargo, la razón que le da sentido a la misión no está en el mar sino en las tierras palestinas, en los acontecimientos históricos y presentes que castigan a su pueblo.
La razón que le da sentido a la misión
La GSF tiene la brújula señalando a un norte claro: romper el bloqueo de ayuda humanitaria, por eso está aprovechando la enorme difusión global que ha logrado para denunciar el genocidio, el intento de ocupación total de Palestina, la limpieza étnica y la hambruna provocada por Israel.
Es un gran aliciente para impulsar la multiplicación y masificación de movilizaciones unitarias, acciones de boicot y la exigencia de que los gobiernos rompan con el Estado genocida y brinden la ayuda alimentaria, en salud y toda la que necesite el pueblo asediado.
Es un grupo humano solidario y valiente que asume la tarea de difundir el horror que se desarrolla en Palestina para que no pase desapercibido y se combata activamente en todos lados.
Es lo que a cada segundo, ante cada medio, en sus comunicaciones y videos también hace nuestra compañera Cele Fierro, que viaja en el Adara en representación del MST de Argentina y la Liga Internacional Socialista (LIS).
Son millones las personas que también están embarcadas en acciones solidarias, por ejemplo, las que en el Estado español lograron una “Histórica cancelación de La Vuelta por la acción popular”.

Escalada criminal agravada
La ofensiva sionista, anunciada desde agosto, ha ido en aumento con el incremento de bombardeos, destrucción de infraestructuras, derribo de torres de gran altura, la declaración de Gaza como “zona de combate peligrosa” por las Fuerzas Armadas de Israel y el llamado a la población a abandonar la ciudad hacia una supuesta “zona humanitaria” cerca de Jan Yunis.
Desde el lunes 16 de septiembre, hay un agravamiento por la intensa ofensiva terrestre con tanques apoyados por ataques aéreos, helicópteros, drones y robots explosivos. La justificación oficial es “erradicar a Hamas” y “recuperar a los rehenes”, aunque a Netanyahu no le interesan. Lo cierto es que las acciones provocan un éxodo forzado de miles de gazatíes, hambruna generalizada, ocupación de más territorio palestino y se realizan con el respaldo explícito de EE. UU.

Un llamado urgente a la solidaridad activa
Desde la LIS también llamamos a multiplicar las acciones de exigencia a los gobiernos para que protejan efectivamente a la Flotilla ante las amenazas y las agresiones del Estado de Israel y sus cómplices y a que se repitan los ejemplos de los trabajadores que en Catalunya e Italia avisaron que si tocan a alguien de la GSF habrá interrupción del comercio y huelgas.
Cada esfuerzo realizado en las actividades abona al fortalecimiento de una salida de fondo para lograr una paz justa y definitiva que, opinamos, solo se puede lograr derrotando al Estado de Israel, a los imperialistas que lo avalan e instaurando una Palestina única, laica, democrática, no racista y socialista con la Revolución Socialista en Medio Oriente.

Marcha global por Gaza en Sao Paulo.




