Chile: 8M, reconstruir en las calles un movimiento feminista, ecosocialista y revolucionario para conquistar nuestros derechos

[:es]Foto Agenciauno[:]

A días de un nuevo 8 de marzo, somos miles de mujeres, lesbianas, bisexuales, travestis, trans, no binaries, estudiantes, trabajadoras ocupadas y desocupadas quienes nos organizamos para tomar las calles con nuestros reclamos. En este marco se da el «Acuerdo por Chile», la orientación de continuidad de los 30 años. Aportamos unas líneas con el objetivo de fortalecer la movilización y la independencia política de nuestro movimiento feminista.

Escribe Abril C.

Toda crisis económica golpea con más fuerza a las mujeres y disidencias. Nosotras y nosotres, oprimidas por nuestra clase y nuestro género, somos quienes sufrimos los ajustes que aplica el sistema capitalista, machista y patriarcal. El capitalismo neoliberal no sólo no garantiza la vida de las mayorías, sino que también arrasa con la soberanía sobre nuestros cuerpos y territorios, generando un ecocidio histórico y el peligro de nuestro planeta. Es por eso que somos miles en todo el mundo que nos rebelamos, desde las movilizaciones en Irán por el asesinato de Mahsa Amini, la resistencia del pueblo ucraniano a la invasión rusa y las movilizaciones en Perú contra la represión de Dina Boluarte.

En nuestro país se agrava la feminización de la pobreza junto con la brecha salarial que hoy es del 12% entre hombres y mujeres, mientras que los femicidios, la falta de derechos sexuales y reproductivos, la corta perspectiva de vida de las personas trans, el acoso sexual, entre otros, son una expresión a la falta de presupuesto para combatir y erradicar la violencia de género, ya que la partida presupuestaria del 1% del PBI que está muy por debajo de las necesidades de las mujeres y disidencias para activar medidas de emergencia frente a esta realidad.

El gobierno autodeclarado ‘feminista’ del Frente Amplio y el Partido Comunista no ha significado un minimo cambio en relación a la continuidad del capitalismo neoliberal y las políticas reales de los cuerpos feminizados. La paridad de género y el manto electoral violeta no alcanzan si la orientación es la misma de los 30 años que ratifican con la farsa constitucional con lo peor de la derecha pinochetista, las mujeres que responden a ese proyecto frenan la potencia transformadora del feminismo.

Constituyente de dinosaurios: el pacto del gobierno con nuestros enemigos

Es en este marco que la propuesta de una nueva constitución, escrita por un Consejo Constituyente y tutelada por una Comisión de expertos, ambos espacios integrados por sectores eclesiásticos y de lo peor de la derecha, no sólo tira a la basura la posibilidad de lograr un piso de derecho para nosotres, sino que impulsa a los espacios anti-derechos, misóginos, anti-mujeres y disidencias y anti-mayorías. 

El proceso orientado a dar un nuevo marco constitucional al neoliberalismo, como escribimos en artículos anteriores, es una hoja de ruta que apunta a cambiar algo para que nada cambie ya que no responde a las necesidades que hoy atravesamos: ¿cómo se resuelve la falta de presupuesto para combatir la violencia de género si no tocamos los pilares económicos y destinamos los recursos a esta problemática?, ¿cómo combatimos la feminización de la pobreza sin resolver la crisis económica, el negociado de las AFP, y peleando por la educación y salud públicas y gratuitas, para además conquistar el aborto legal, seguro y gratuito?, ¿cómo terminamos con la justicia patriarcal si no es con una democratización de todas las instituciones cómplices del Estado? 

No sólo es más de lo mismo, sino que agrava la situación de nuestro colectivo y elimina cualquier posibilidad de cambios reales. Es por eso que nos oponemos a esta farsa constitucional alejada de las necesidades actuales, a espaldas de las mayorías y sobre todo al servicio de dar legitimidad al régimen golpeado desde la rebelión y denunciamos a este gobierno que se sienta con los dinosaurios y abre el camino a los discursos de odio, que pacta con la derecha manteniendo la opresión y explotación sobre mujeres, disidencias y mayorías sociales.

Es por eso que es fundamental retomar la iniciativa, no delegando nuestras fuerzas tal como se hizo en la pasada Convención Constitucional en dónde sectores como la Coordinadora Feminista 8M confió en los limites institucionales en desmedro al fortalecimiento de la organización en asambleas y la presión en las calles, es importante sacar aprendizajes para robustecer la potencia feminista en amplia unidad para enfrentar la carestía de la vida, exigiendo paro y huelga a las centrales sindicales y estudiantiles para hacer efectiva las medidas de presión. La pérdida de independencia política pone en peligro la lucha por nuestros derechos.

Por un feminismo a la altura de nuestras luchas

Las feministas liberales o posibilistas, de ‘la medida de lo posible’, no sólo promulgan las ideas de la conciliación de clases atrasando a nuestro movimiento, sino que enchalecan la potencia transformadora que construimos en estos años. Nos sobra fuerza, lo demostramos en cada 8M, 25N y pañuelazos. Confiar en un sistema que se nutre gracias a la doble opresión que vivimos y en sus instituciones libera el camino y les da más espacio a quienes legislan y gobiernan en contra nuestro. El enemigo no es de género, es de clase: no sirven más mujeres si no es con una perspectiva antisistema para transformar todo al servicio de las mayorias.

Nosotras, feministas anticapitalistas, te proponemos otra hoja de ruta: recuperar la fuerza transformadora de nuestro movimiento organizadas y organizades en las calles y democráticamente, sin pactar ni ceder, luchar por todos nuestros derechos para que seamos nosotres quienes decidamos y no los garantes del capitalismo. Para esto te proponemos construir una alternativa política para que gobiernen quienes nunca gobernaron, mujeres, disidencias, trabajadores y mayorías sociales y no los mismos de siempre. En síntesis, organizarnos para transformar todo y vivir libres de toda opresión y explotación. Por eso te invitamos a participar de este 8M y a construir el Movimiento Anticapitalista.

A 50 años del golpe militar, contra la impunidad de ayer y de hoy.

¡Llenemos las calles con nuestros reclamos!

  • Abajo la Convención fraudulenta, Asamblea Constituyente libre, soberana y democrática.
  • Ni una menos, vivas nos queremos
  • El Estado es responsable 
  • Presupuesto para erradicar la violencia de género
  • Aborto legal ya
  • Basta de acoso y violencia
  • Soberanía sobre nuestros cuerpos y territorios
  • Ley integral trans