¡Castigo a Fernández Guaza, asesino de Arturo Ruíz!

Fue encontrado en Buenos Aires, pero sigue gozando de impunidad. En España y Argentina es necesario exigir justicia contra los crímenes de lesa humanidad.

Por Rubén Tzanoff

Arturo Ruiz García nació en Granada, el 5 de diciembre de 1957, era un estudiante y militante de izquierdas español cuando fue asesinado en Madrid, el 23 de enero de 1977 durante una manifestación pro-amnistía.

El criminal que terminó con su vida fue el ultraderechista José Ignacio Fernández Guaza. Huyo de España con la colaboración de la Guardia Civil y la CRS francesa. Con un pasaporte falso provisto por los servicios de seguridad españoles y bajo el paraguas de las dictaduras militares de Argentina y Paraguay, pudo residir en esos países sin ningún problema. Fernández Guaza es hijo de un militar falangista, amigo del presidente del gobierno franquista Luis Carrero Blanco. Tenía excelentes relaciones con la policía, con el torturador Antonio González Pacheco (Billy el niño) y con las autoridades españolas.

Desplegando una impunidad sin límite, también contó que: en España participó del plan franquista para liquidar activistas antidictadura, que en Argentina recibió la visita de funcionarios que en 1979 le preguntaron si iba a seguir “trabajando”, que en Paraguay mantuvo una reunión con agentes de la Interpol con los que acordó seguir fugado, que tuvo contactos con los neofascistas italianos de Stefano Delle Chiaie, vinculado a varios asesinatos en España y también con organizaciones fascistas que cometieron crímenes durante la transición. Sus dichos dan por tierra con un dictamen de la Audiencia Nacional que determinó que el asesinato de Arturo Ruiz no fue debido a la dictadura franquista.

Lo encontraron en Buenos Aires

Todas las confesiones citadas las hizo en una entrevista que, después de 46 años, sirvió para localizarlo en Buenos Aires, Argentina. Los abogados de la familia pidieron el arresto y la indagatoria, pero el fiscal argumentó que no está probado que sea un crimen de lesa humanidad. Como cruel paradoja de la vida, hoy ha muerto Manuel Ruiz, hermano de Arturo sabiendo que el asesino vive impunemente en Argentina sin que la justicia argentina y la española hagan nada, como tampoco el gobierno de “coalición progresista” de Pedro Sánchez y el PSOE.

Es evidente que el criminal disfruta de una impunidad total en España y Argentina, que es necesario quebrar para que se haga justicia, como lo exigen los familiares de Arturo, sus abogados y el Colectivo por los Olvidados de la Transición (C.O.T.). Los crímenes de Arturo Ruíz, de Yolanda González y Gustau Muñoz son sólo tres de los casos que demuestran que la dictadura franquista fue feroz y que los crímenes continuaron durante la transición que no tuvo nada de modélica.

La transición no fue modélica

Según los datos que ofrece el historiador Gonzalo Wilhelmi, entre los años 1975 y 1982, hubo 233 víctimas de la violencia política estatal, 156 de las cuales fueron víctimas de miembros de las fuerzas de seguridad y 77 de la extrema derecha en connivencia con el aparato estatal. La transición fue la consagración del reaccionario régimen monárquico-parlamentario del ’78.

Apoyo a la “Querella Argentina” y a la detención y castigo al asesino de Arturo El crimen de Gustau reclama castigo contra la impunidad de Martín Villa en la “Querella Argentina” y el asesino de Arturo debe ser inmediatamente detenido, indagado y juzgado por crímenes de Lesa Humanidad. Pase el tiempo que pase, es necesario luchar por la verdad y la justicia, en Argentina y España. Se trata de revindicar la memoria por la dignidad de las víctimas y para que no se repitan los crímenes nunca más. Así lo hacemos desde Socialismo y Libertad (SOL) – Estado español y el Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST-Argentina) como integrantes de la Liga Internacional Socialista (LIS).