Por Sergio García
Pasó el 1° de Mayo, la histórica marcha universitaria, antes, los masivos 24M y 8M, en febrero las jornadas frente al Congreso contra la Ley Ómnibus y a fines de enero habíamos tenido un paro general con miles en la calle. En el medio paros sectoriales, asambleas barriales, un movimiento de lucha por la cultura, jubilados indignados. Tanta lucha y energía en solo cinco meses de gobierno del ultraderechista Milei.
El gobierno ha sentido varios golpes en este tiempo, no la tiene fácil. Y si puede seguir avanzando con su ajuste y ahora con la ley Bases, es por el fuerte apoyo imperialista y empresarial que recibe, más el rol nocivo de direcciones sindicales burocráticas que le dan tiempo, que se borran o que apenas convocan a medidas tardías, aisladas y descoordinadas. A lo cual se suma, lógicamente, la base social que todavía lo acompaña.
Pese a todo esto, miles de trabajadoras, trabajadores, estudiantes y sectores populares han ganado las calles reiteradas veces. Han puesto el cuerpo para decir “las calles son nuestras” enfrentando el protocolo represivo de Bullrich, aguantando gases, provocaciones y amenazas. Dando fuerte esta pelea no tenemos dudas que así seguirá sucediendo. En un país polarizado política y socialmente, frente a un plan reaccionario vendrán más confrontaciones porque los derechos no se negocian. Ellos no quieren frenar y nosotros podemos frenarlos.
Sabiendo todo esto, viendo y participando a diario de esta realidad, es que nos proponemos elevar el peso y la ubicación de la izquierda en el plano político. Porque reivindicamos ser el único sector político que desde el primer día está peleando contra Milei en la calle, dentro y fuera del Congreso, contra el ajuste en legislaturas y concejos. Contra la burocracia en sindicatos. Contra el hambre y las mafias en los barrios. Revindicamos la coordinación lograda y expresada en cada jornada de lucha e impulsamos su continuidad.
No miramos para otro lado cuando vemos a miles y miles que luchan sin tener pertenencia política activa, sin militancia organizada ni protagonismo cotidiano. Y el rol de la izquierda anticapitalista y socialista es buscar siempre la forma de avanzar cualitativamente en que miles se sumen, sean parte junto a nosotros y nosotras en la lucha política por los cambios de fondo que hacen falta.
Por eso le proponemos a los demás partidos del Frente de Izquierda Unidad que convoquemos a un gran Congreso Abierto del Frente de Izquierda. Tenemos desafíos enormes por delante y necesitamos de toda la fuerza. No alcanza para nada que nuestro frente siga siendo solo un lugar para la militancia de nuestros cuatro partidos. Hay miles de luchadores obreros, populares, referentes de la izquierda social, ambientalistas, compañeros independientes, intelectuales, organizaciones amigas, votantes del FIT-U, y trabajadores y jóvenes decepcionados con el peronismo. Todas y todos ellos tienen que ser convocados a un Congreso Abierto en un estadio, en Plaza de Mayo o donde sea que miles puedan participar, protagonizar, debatir y decidir.
Hacemos esta propuesta convencidos de que nuestra tarea es transformarnos en una opción de poder para millones de trabajadores y la juventud. No queremos ni conformismo, ni electoralismo ni hacer más de lo mismo. El espacio político conquistado por nuestro frente hay que defenderlo sin por eso detenernos solo en ese lugar. Queremos organizar políticamente a miles y miles y poner toda esa fuerza a favor del Frente de Izquierda Unidad, del programa alternativo que tiene, de la estrategia por un gobierno de las y los trabajadores.
Abramos en medio de la lucha contra Milei un canal de participación política activa, convoquemos, impulsemos, abramos las compuertas a la contribución de miles. Hagamos un gran Congreso Abierto para fortalecer a nuestro frente. No hay que tener miedo a que miles se acerquen y traigan sus opiniones, que debatan y propongan. En un Congreso de militantes y simpatizantes cada cual trae sus propuestas y las pone a consideración. A un Congreso así nosotros llevaremos la idea de que el frente sea mucho mejor y más fuerte, transformándose en un gran movimiento político con lugar para miles, con reuniones semanales de su dirección, vida política activa, respuestas políticas comunes, lucha común en cada ámbito social, gremial y estudiantil de disputa, no solo en las elecciones. Y cada partido del FIT-U llevará sus propuestas. Para que todo se debata, busquemos acuerdos, no ocultemos si hay matices o diferencias y al final decidamos democráticamente como seguir.
No perdamos más tiempo. Necesitamos un evento de miles, muy democrático, de lucha y para avanzar en que millones se referencien en la izquierda y el FIT-U. La llegada de Milei al gobierno ha sido una expresión por derecha ante el desastre ocasionado por el PJ en el gobierno. Tenemos que luchar por salir de Milei sin volver a nuevas frustraciones, haciendo algo nuevo. Solo la izquierda puede abrir ese camino. A condición de que nuestro frente convoque abiertamente en primer lugar a un gran Congreso, para luego con esa fuerza y participación de miles, disponernos a una lucha política y social mucho mayor.