Terminado el primer turno de las elecciones presidenciales de la República, se confirmó el escenario que ya venían planteando desde hace algunas semanas las principales encuestadoras de opinión. Con 46,03% de los votos, el candidato de extrema derecha Jari Bolsonaro (PSL) salió primero, y enfrentará a Fernando Haddad (PT), que terminó con 29,28%, el día 28 de octubre. Independientemente de quien gane, la situación no será nada favorable para la clase trabajadora, dado que tanto una candidatura como la otra, no proponen de hecho una ruptura con el actual sistema de explotación, y la polarización experimentada en esta contienda electoral, tenderá a agudizarse, una vez que uno de los dos salga insatisfecho con los resultados de las urnas, el ex capital del ejército, proto-fascista, ya dejó claro que no está dispuesto a aceptar una posible derrota.
Antes que nada queremos reafirmar nuestra posición de repudio a este candidato reaccionario, y el proyecto de país que él representa; de ataques brutales a los derechos de trabajadores y trabajadoras, de incitación al odio contra las mujeres, negros y negras, comunidad LGBT, pueblos originarios, organizaciones de izquierda, y de exaltación de la violencia. El candidato del PSL defiende y representa lo que fue lo peor de la política brasilera, un gobierno suyo sería lo peor para la mayor parte de la población de nuestro país. Al mismo tiempo, no nos ilusionamos con la candidatura de Fernando Haddad como hacen erróneamente muchas organizaciones y militantes sinceros de izquierda. El principal resultado, de más de 13 años de gobierno, del Partido de los Trabajadores fue la desmovilización de la clase trabajadora y la traición de las principales direcciones obreras y de la juventud. Eso sin hablar de la completa desmoralización de la izquierda en general, que hoy tiene que cosechar, los frutos de la conciliación de clases de Lula y Dilma, y de la relación promiscua de sus gobiernos con partidos políticos burgueses, con contratistas y grandes empresarios. Nosotros haremos una campaña por la democracia y en contra del fascismo. No para el programa de gobierno presentado y representado por el PT.
¿Qué hacer?
Ante la grave situación que presenta, defendemos un voto profundamente crítico al PT, no porque creemos en su programa, pero no podemos permitir el retroceso que significaría la elección de alguien como Jair Bolsonaro. No hacemos coro con los sectarios, que ya empiezan a hacer campaña en defensa del voto blanco o nulo, como si los dos postulantes a la presidencia de Brasil fueran la misma cosa, y tampoco caemos en un apoyo acrítico de los reformistas y oportunistas de turno.
Como socialistas, tenemos el deber de hacer lo máximo para defender a la clase trabajadora de un mal más grande, que en este momento, no tenemos dudas, que se trata del candidato fascista del PSL. Eso no significa que iremos a las calles a levantar las banderas del PT, o subirnos a su campaña electoral con figuras del partido.
Nuestra Bandera es “En las calles y en las urnas Contra el Fascismo”, y ese va a ser el ton que ponemos a esta campaña en la segunda vuelta, fortaleciendo la unidad, en las calles, con todas aquellas y todos aquellos que estén dispuestos a no permitir un avance de la ultraderecha, y hacer la defensa incondicional de los derechos de todos los explotados y oprimidos de este sistema injusto.
Alternativa Socialista / Anticapitalistas En Red – Brasil